Deisy Lucas Moreno (18) y Adelaida Franco (17) tienen como meta ayudar a su comunidad. Llegaron hasta Asunción desde su natal Neuland, localidad situada en el centro del Chaco paraguayo, a unos 450 kilómetros al noroeste de la capital.
Meta a cumplir
Las jóvenes de la parcialidad indígena Nivaclé son algunas de las beneficiarias de las becas de Itaipú desde este año. Superaron la distancia, la precariedad y la pobreza para formar parte de los 2.136 chicos que lograron acceder a la ayuda.
Moreno contó que, con mucha ilusión, ambas estudiaban juntas en la plaza del barrio de su distrito. “Nos preparamos mucho para rendir. Mi mamá está feliz y triste a la vez porque ahora tengo que estudiar lejos de mi casa, pero mi sueño de niña es llegar a ser doctora”, declaró Deisy quien, según los registros, podría ser la primera médica de esta parcialidad nativa.
La estudiante recalcó que es la primera integrante de su familia que iniciará sus estudios en la facultad. “Eso me llena de orgullo”, admitió.
“Ade”, conocida en su barrio como Franco, indicó que tiene una hermana mayor que estudia Formación Docente y que le gustaría ser una gran odontóloga para servir luego en su comunidad.
“Mi mamá lloró de la felicidad. Todo es más sacrificado lejos de la gran ciudad. Ojalá podamos encontrar algún lugar para instalarnos”, declaró la joven.