Mirtha Noceda vive desde hace 11 años en el barrio Primavera de la ciudad de Luque y siempre quiso refaccionar su casa y levantar su muralla. Esto último ya lo logró, y con sus propias manos, tras haberse formado en albañilería.
Ella se capacitó este año en el área de construcción en el Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP) del Ministerio de Trabajo. Empezó las clases en junio y ayer recibió su certificado de Armador de hierro en hormigón. También sigue estudiando para ser Oficial de albañilería y su idea es llegar a ser contratista.
La doña contó que anteriormente quiso estudiar la carrera de Derecho, pero un problema de papeleo se lo impidió. Después decidió formarse en un oficio y eligió la construcción.
Al principio sintió la resistencia de su familia y hasta los vecinos le criticaban.
“Me retaron desde que salí de mi casa hasta llegar al SNPP, porque no querían que estudie albañilería”, dijo.
También recordó que casi abandonó el primer día de clase cuando el profesor comenzó a hablar de matemática, metros cúbicos y ese tipo de conceptos. Tenía miedo de fracasar y salió del aula, pero el instructor se dio cuenta y le pidió que se quede.
Pronto se familiarizó con los contenidos y se dio cuenta de que nadie la iba a parar en su objetivo.
“Mediante los conocimientos que obtuvo en las clases teóricas y prácticas pudo levantar la muralla de 2 metros de altura en su vivienda y solo le falta una parte para culminar el cercado, que cuenta con pilares de hormigones revestidos de ladrillo. Ahora, los que antes le criticaban por estudiar albañilería son sus ayudantes”, destacó el SNPP.
Mirtha dijo que luego de terminar el muro de su casa con la ayuda de su esposo, sus hijos, un sobrino y un compañero de estudio, refaccionará el dormitorio de sus retoños.
Así también, ya está iniciando la construcción de una piscina y tiene proyectado hacer un quincho y la vereda de su vivienda.