30 abr. 2025

Doña le garroteó a su marido y fue detenida

Tuvo que pedir auxilio a la policía. Habrían discutido por celos, el karai retiró la denuncia.

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Mónika fue llevada hasta la comisaría de mujeres de Alto Paraná, pero fue liberada ese mismo día.

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Una brasileña identificada como Mónika Schmutzler (46) protagonizó un escándalo en su vivienda del barrio San José, cerquita del Club Área 1 de Ciudad del Este.

Según el relato del afectado, Luis Antonio Concepción (57), la cosa se puso fea el sábado a la madrugada, cuando empezaron a discutir.

El hombre intentó calmarla, pero no pudo y la doña fue alterándose cada vez más hasta golpearlo reiteradas veces.

Como la sitú se salió de control, el arriero tuvo que llamar al 911 y minutos después, agentes de la comisaría 7ª acudieron al pedido de auxilio del pobre hombre golpeado.

Según el propio comisario Mariano Sosa, al principio pensaron que el garrotero era el marido, pero ha’e la víctima ra’e.

“El señor nos recibió y nos contó lo que pasó y cuando llegamos, la señora todavía estaba muy alterada y prepotente”, comentó.

¿Fue por celos?

Si bien, el hombre no quiso dar mayores detalles según fuentes extraoficiales, la pelea habría empezado por celos.

“No es oficial pero nos comentaron que la señora momentos antes estaba en una discoteca”, indicó.

Aparentemente, la brasileña ya había tenido otro violento encontronazo con el guardia del boliche, quien habría hecho una denuncia previa por violencia en la comisaría 1ª.

La señora fue llevada hasta la comisaría de mujeres, pero fue liberada ese mismo día, ya que el propio marido pidió no continuar con la denuncia.

Retiró la denuncia

Aparentemente, para evitar pleitos, el hombre habría mencionado en la fiscalía que no hubo golpes y que solo fue una discusión verbal.

Sin embargo, la fiscal Susan Vega confirmó que igual se activó el protocolo legal y ahora están viendo cómo proceder.

Después del incidente, Mónika regresó al Brasil, prometiendo enfrentar el proceso judicial.

El caso generó polémica en redes sociales donde algunos lo señalaban como un caso no muy común.

Sin embargo, otros alegaron que es muy frecuente y que muchos no denuncian por miedo a las burlas.