Vista aérea del maizal donde derribaron una columna de alta tensión de la ANDE, en Tacuatí, San Pedro. Encontraron un escrito en el cual amenazan a los pobladores si no cumplen sus exigencias.
El vocero de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), mayor Alfredo Ramírez, fue destituido luego de que denunció públicamente que integrantes del cuerpo militar policial filtran datos para impedir la captura de miembros del EPP.
El capitán Luis Amílcar Vera asume el cargo en reemplazo de Ramírez. De igual manera, deberá prestar declaración ante el Ministerio Público por sus declaraciones.
Esta situación se da luego del atentado con explosivos contra una torre de alta tensión de la ANDE, ocurrido en Manitoba, Tacuatí (San Pedro), el domingo por la tarde.
El fiscal Joel Cazal anunció que iniciarán una investigación sobre frustración a la ejecución y persecución penal dentro de la FTC. Las filtraciones se dan a través de fuegos pirotécnicos o llamadas de celulares para alertar sobre la presencia de los uniformados , según Ramírez.
PANFLETO
Un panfleto por parte del EPP fue encontrado en el sitio donde detonó el explosivo. En el escrito exigen a los pobladores las prohibiciones de portar armas, usar agroquímicos e ingresar a zonas boscosas.
Además, reivindican a los integrantes caídos del grupo armado y amenazan con fusilar a los que no cumplan con sus exigencias. El papel fue derivado a Criminalística para detectar huellas dactilares. Por otra parte, los hospitales regionales de San Pedro funcionaron con normalidad con los generadores.
MIEDO Y PÉRDIDAS
El miedo se instaló hasta en las colonias donde anteriormente se trabajaba de manera tranquila. El ataque sucedió a tan solo 14 km del centro urbano de Tacuatí.
El titular de la ANDE, Víctor Romero, manifestó que los gastos por la energía no vendida sería de aproximadamente 1 millón de dólares. Por otro lado, se hizo público que familiares del menonita secuestrado, Abraham Fehr, se reunieron con Horacio Cartes el jueves pasado a las 16:00, en Mburuvicha Róga. La torre dañada dejó a oscuras a 750 mil personas en el norte del país y parte del Chaco, durante 18 horas.