En la lejana localidad de Puerto Casado (Chaco), los usuarios reciben por gotas el agua potable en las canillas, situación que ya es una constante y empeora en esta época de calor.
En los barrios María Auxiliadora y Don Bosco, los vecinos tuvieron que abrir un pozo y además quitaron el grifo para juntar el líquido en baldes ya que apenas llega a las casas, sin presión alguna.
La Junta de Saneamiento aún no se pronuncia ante este problema, que cada vez va abarcando a otros barrios.
Sufren, pese a vivir aorillas del río Paraguay
Ante esta situación, la Gobernación de Alto Paraguay envió un tanque cisterna movido por un tractor para repartir agua en cada domicilio, ya que los vecinos se quejaban por diversos medios por el pésimo servicio que reciben.
Una hora por la mañana, otra al mediodía y luego a la tarde, así se maneja la red de distribución que es muy escasa, ya que existen unos 700 usuarios.
Lo irónico es que Casado está a orillas del río Paraguay, donde hay una planta del acueducto preparada para bombear agua, hacia el Chaco Central