Juan Andrés Olmedo Penayo (21), fue asesinado de dos balazos por parte de motochorros, cuando intentaba recuperar la moto que le habían robado minutos antes.
Eran cerca de las 22:00 del sábado, cuando el joven; que trabajaba como delivery de una lomitería, en Luque, fue a entregar un pedido a la vuelta, sobre la ruta Vergel Luqueño (Luque – San Bernardino), a unas pocas cuadras de su lugar de trabajo fue interceptado por dos jóvenes sobre una moto y a punta de arma de fuego le exigieron la entrega de su biciclo.
Sin poder hacer nada, entregó la moto y luego corrió hasta la lomitería, contó a su jefe Osmar Troche lo que había pasado y pidió otra moto para seguir a los motochorros. Ambos fueron tras los delincuentes y lo siguieron otras personas más.
Persiguieron por varias cuadras a los motoasaltantes, hasta que, en una zona oscura, del barrio Compañía Itá Angu’á, sobre la calle Sargento Mauricio Ovelar, a unas tres cuadras de la cancha del Club General Caballero, los delincuentes, que ya eran 4 sobre dos motos, se vieron acorralados y una de las motocicletas con dos ocupantes dio la vuelta y el acompañante realizó varios disparos con arma de fuego.
Lamentablemente, dos de las balas impactaron en el joven, uno en su rostro y otro en el pecho, lo que provocó su muerte en el mismo lugar. El acompañante, Osmar Troche, salió ileso del hecho.
Piden justicia
Según el fiscal Silvio Alegre, los agentes de Investigaciones están realizando las diligencias para poder identificar y detener a los presuntos autores, hasta ayer no había aún nada.
“Se trataría de una banda de delincuentes dedicada al robo de motocicletas. Estarían operando en grupo según los datos que tenemos”, dijo el fiscal.
Familiares y amigos de la víctima fatal piden justicia para el chico que trabajaba duro para salir adelante y ayudar a su mamá. Su sueño era ser un gran futbolista, el mismo estaba practicando en las divisiones formativas del Deportivo Luqueño.
Otros casos
El pasado 30 de diciembre, el delivery Roberto Sánchez (24), se encontraba entregando pedidos en la zona de Rojas Cañada de Capiatá, cuando unos motochorros lo interceptaron y para robarle la moto y otras pertenencias, lo acuchillaron en el cuello, pero afortunadamente sobrevivió.
En octubre del año pasado, Ángel Domínguez fue atacado también por motoasaltantes cuando trabajaba como delivery quienes lo hirieron y falleció esperando ambulancia.