El cuerpo de Roque Bautista Zaracho Cáceres, de 23 años, fue encontrado sin signos de vida en la tarde de ayer, lunes, en su departamento, ubicado en el barrio San Pedro de Encarnación, Itapúa. Aparentemente murió por inhalación de monóxido de carbono.
El padre del muchacho, don Juan Zaracho, y su hijo Enrique, fueron hasta la vivienda del joven, ya que este no atendía las llamadas ni respondía los mensajes.
Al llegar al sitio, encontraron la puerta abierta y, al entrar, vieron a Roque acostado en el sofá, sin signos de vida y a su lado izquierdo un brasero, ya con cenizas, por lo que llamaron a la policía, según publicó el portal MasEncarnación.
En el lugar llegaron la fiscala Zulma Britos y el médico forense Aldo Von Knobloch, quien inspeccionó el cuerpo, determinando que la causa de muerte fue asfixia por monóxido de carbono.
La fiscal ordenó la entrega del cuerpo a los familiares.