El pasado miércoles, la señora Aparicia Ávila de Reyes (59) acudió a la Comisaría 82 de Edelira Kilómetro 28 (Itapúa), para denunciar que su vecino, Rufino Argüello (56), quien vivía solo, no regresaba a su casa desde hacía días. El hombre fue encontrado muerto ayer y los cuervos ya le comieron las piernas.
Alrededor de las 11:30 horas de ayer, Emilia Ester Benítez Lugo, residente en el barrio Virgen de Fátima Quinta Línea del citado distrito, vio a unos cuervos que se posaron en lo alto de un árbol ubicado en una propiedad perteneciente a Jorge Caballero, quien vive en Buenos Aires (Argentina).
Entró a verificar el lugar y, tras superar un yuyal, encontró un cuerpo sin vida, que resultó ser del hombre, cuya desaparición fue denunciada en la mencionada sede policial.
Tras el susto inicial, la mujer llamó al Sistema 911 para informar del hallazgo.
Acudieron los agentes de seguridad y comprobaron que se trataba de un cadáver, en avanzado estado de putrefacción, con las dos piernas amputadas por encima de las rodillas, según señala el informe sobre el caso. Se presume que los cuervos y otros animales devoraron partes del cadáver.
Estaba boca para arriba, con los brazos extendidos por detrás de la cabeza y su remera roja recogida hasta el cuello.
Intervinieron además el asistente fiscal Francisco Bareiro y el médico forense Gustavo Cabrera, quien dictaminó que la causa de la muerte todavía no se podía determinar, por el estado de descomposición del cadáver.
El cuerpo fue entregado a Zunilda Estanislada Colmán Zarza (41), de Edelira Kilómetro 28, para dar sepultura al cuerpo, según indica el reporte oficial.