Gustavo Cabrera se prepara para hacer una última vuelta antes de almorzar. Ya van tres viajes en el día El problema de la inundación por las que atraviesan miles de familias, sobre todo en el Bañado Norte y Sur, hace que abandonen sus casas para instalarse en los refugios. En medio de la crítica situación hay muchas personas que encontraron en la inundación un negocio más que rentable. Son los carriteros que hacen su “agosto” con las mudanzas de los damnificados.
Es el caso de Gustavo Cabrera, del barrio Luján del Bañado Sur, que dejó por el momento el oficio de jardinería para trasladar los enseres de las familias afectadas en su motocarro. “Le cobro a la gente entre 20 a 30 mil guaraníes”, dijo entre risas Cabrera.
Afirmó que por día puede llegar a sacar entre G. 120.000 a G. 150.000, dependiendo de la cantidad de cosas que deba llevar y la distancia donde quieran mudarse las personas.
Cambio de rubro
Ramón Costa es otro joven que también cambió de empleo aprovechando la inundación. Él vende frutas y verduras con su carrito tirado a caballo. Contó que los afectados les piden para trasladar sus cosas a los refugios. “Yo cobro de acuerdo a la cara del cliente, hay gente que puede darnos más y otros menos”, sostuvo Costa.
“Sacamos bien, a veces llegamos hasta G. 80.000 por día”, aseguró el carritero. Lo que para muchos es un drama de nunca acabar para otros es una buena oportunidad para hacer dinero extra.