Con un calor de 39°, bajo tinglado, con improvisadas sillas, cientos de alumnos de 15 cursos distintos del Colegio Nacional de Lambaré (CNL) iniciaron sus clases ayer en el predio del Colegio Virgen del Rosario, luego del derrumbe del techo de un aula. “Es muy difícil dar clases en estas condiciones. Estamos todos encimados y los chicos no tienen pupitres. Usamos las sillas que son para la misa” indicó Zúlida Miranda, una de las profesoras de la institución. Agregó que la situación se complicará hoy, cuando los alumnos del colegio privado, en donde están reubicados, retornen a clase, ya que ayer tuvieron asueto. El CNL está siendo verificado para evitar que más aulas se derrumben.
Otras escuelas
El director del Colegio Juan Ramón Dahlquist, de Asunción, aclaró que el jueves pasado, día de la caída de parte del techo, comunicó lo ocurrido al Ministerio de Educación. Las autoridades ordenaron la clausura de ocho aulas por peligro de derrumbe. El MEC aseguró que proporcionará aulas móviles a esa institución. Mientras tanto, aproximadamente 160 alumnos dan clases en otras salas, como la biblioteca y sala de Informática
En otro escenario, alumnos del Colegio Bernardino Caballero, de Fernando de la Mora, denunciaron que varias aulas fueron clausuradas por los directivos debido a las pésimas condiciones, pero que nunca fueron arregladas. Exigen la presencia del MEC para su verificación.
Anuncian operativo
Mediante un convenio con los Bombero Voluntarios, el Ministerio de Educación inició un operativo de evaluación de varios colegios de distintas ciudades.