Evandro Padilha, uno de los detenidos.
Uno de los 28 detenidos días atrás por el gigantesco cargamento de cigarrillos en Pedro Juan Caballero es un pistolero que siembra terror en la frontera y recientemente fue contratado para matar a un “sombrero” que se metió con una esposa ajena en el lado paraguayo, además de varios crímenes que se le atribuyen en el vecino país.
Se trata de Evandro Francisco Padilha (22), más conocido como “ET”, quien por sus antecedentes en Brasil fácilmente podría tener una condena de 100 años de cárcel, según publica el diario gaúcho Zero Hora. Evandro estaba entre los 12 brasileños y 16 paraguayos detenidos el jueves último con 22 camiones cargados de cigarrillos paraguayos, varios de ellos de Tabesa, propiedad del presidente Cartes.
Estancia de Cerro Cora’i (Amambay), allanado el jueves último.
El sicario normalmente actuaba en la frontera entre Paraguay y Brasil; es buscado en tres estados del vecino país: Rio Grande del Sur, Paraná y Mato Grosso. “El es tratado como pistolero en la región. Yo estoy aquí hace 30 años y él seguramente es uno de los más violentos que investigué", asegura el director regional de policía de Naverai (Mato Grosso), delegado Claudineis Galinari.
El jefe policial relató que el crimen más reciente atribuido a Evandro Padilha ocurrió en el municipio de Nuevo Mundo (Mato Grosso), hace aproximadamente tres meses. Entonces habría ejecutado a un hombre que era sospechoso de meterse con una mujer casada en el lado paraguayo. El marido ofendido por el episodio, lo contrató para ultimar al “sombrero”.
Pero el caso por el cual se le busca desde 2015 ocurrió en Valle de Sinos (Rio Grande del Sur), cuando fue contratado para matar a una pareja catarinense que quería vender una propiedad. Con otros tres delincuentes, Padilha emboscó, descuartizó y quemó a Paulo César Raichaski (42) y su esposa Solange de Lima Vargas (35). El que les contrató, Vladmir Luciano de Jesús Israel Zeferino, “Gordo Wlad” no les pagó y terminó en prisión, donde finalmente murió.
Los detenidos serían del PCC y el predio allanado sería propiedad de Pavâo.
Padilha y los otros 27 fueron detenidos tras tirotearse con la policía en la mañana del 7 de diciembre en la localidad de Cerro Cora’i, de Pedro Juan Caballero, a unos 400 metros de la frontera con el Brasil. Según Zero Hora, entre los principales cigarrillos incautados se encontró la marca R7, “que se convirtió en símbolo de una faccción criminal (PCC) en el interior del Estado en el mercado del contrabando de cigarrillos”.