Unos 1.000 taxistas cerraron al menos cinco cuadras de la avenida Mariscal López, en inmediaciones de la Municipalidad de Asunción, para exigir el cumplimiento de la ordenanza que regula la habilitación de las paradas.
Ayer, a las 09:00, el “enjambre amarillo” se apoderó de ambas calzadas, desde R.I. 18 Pitiantuta hasta Tte. 1° José D. López, impidiendo la circulación vehicular. El reclamo se debe a que la Junta Municipal aprobó la apertura de una nueva parada sobre Yby’a y Ñanduti, barrio San Pablo, en las cercanías del Mercado de Abasto.
Arístides Morales, presidente de la Asociación de Profesionales Taxistas de Asunción (APTA), dijo que numerosas estaciones fueron creadas sin respetar lo que establece la normativa municipal, como por ejemplo el estudio de mercado y el llamado a licitación para la adjudicación de los puestos.
“Acá el problema es Elvio Segovia: donde hay proyecto de paradas, aparece él”, acusó Morales, en alusión al concejal de Asunción por el PDP. Por su parte, el taxista Roberto Velázquez señaló que todos se ven afectados con las nuevas paradas, ya que la oferta es mayor que la demanda. Agregó que incluso podrían llegar a pelearse por los pasajeros.
Acuerdo
Tras reunirse con el jefe de Gabinete, Max Rejalaga, y el concejal Víctor Menacho, el gremio de trabajadores decidió levantar la medida de protesta que duró más de una hora. Acordaron que la nueva parada no funcionará hasta que hablen con el intendente Mario Ferreiro, el miércoles 21 de septiembre.