19 abr. 2024

Apresan a “tóxico” que puso GPS con micrófono a su ex

“Cavaste tu tumba”, le dijo porque lo denunció por violencia.

El calvario de una odontóloga de 39 años comenzó después de casarse. Estuvieron juntos por 19 años y tuvieron tres hijos. Ella denunció que sufrió en silencio los maltratos físicos y psicológicos de su marido, O. G., un comerciante de 47 años de Ciudad del Este (Alto Paraná). Por eso tomó una de las decisiones más duras para ella: huyó de casa para salvar su vida.

La situación empeoró ese mismo año cuando lo denunció por violencia, y tiempo después descubrió que estaba siendo rastreada por su esposo, quien no solamente colocó un GPS con micrófono de 500 dólares (casi 4 palos) en su silla de odontología, también la controlaba desde el celular. La primera denuncia fue realizada el 13 de septiembre del año pasado. La víctima se había refugiado en casa de su hermana cuando O. llegó al lugar y, antes de querer llevarla a la fuerza, maltrató a la mujer y amenazó de muerte a sus familiares.

Estaba conectado a una batería de moto que fue colocada debajo de la silla de odontología de la víctima.

Estaba conectado a una batería de moto que fue colocada debajo de la silla de odontología de la víctima.

Gentileza

La segunda ocurrió en junio del 2021. Aquella vez la víctima denunció que estaba siendo acosada por el padre de sus hijos, quien incluso la tenía amenazada y la perseguía a todas partes. La mujer teme por su vida y está escondida. La última amenaza que recibió fue el pasado domingo cuando le envió un audio de WhatsApp a un familiar. “Cavaste tu tumba”, le mandó decir porque amplió su denuncia.

Pelagio Giménez, abogado de la afectada, señaló a EXTRA que en noviembre del 2020 la doña había retirado sus pertenencias de la casa y las llevó a lo de su defensor. O. G. la llamó para decirle que sabía dónde estaba porque él mismo le dijo que le colocó un GPS.

Había sido el aparato estaba dentro del motorcito que sirve para inclinar la silla odontológica y estaba conectado a una batería de moto. No se podía ver a simple vista porque fue colocado debajo del asiento y estaba cubierto por una carcaza (tapizado).

El aparato estaba dentro del motorcito que sirve para inclinar la silla odontológica y estaba conectado a una batería de moto. No se podía ver a simple vista porque fue colocado debajo del asiento y estaba cubierto por una carcaza (tapizado).

El aparato estaba dentro del motorcito que sirve para inclinar la silla odontológica y estaba conectado a una batería de moto. No se podía ver a simple vista porque fue colocado debajo del asiento y estaba cubierto por una carcaza (tapizado).

Gentileza

Imputado tenía orden de captura

La fiscala Rocío González imputó a O. G. por violencia familiar y coacción. El hombre fue detenido el lunes cuando fue a la comisaría para hacer unos trámites.

Controlada día a día

La víctima pilló que sus conversaciones eran escuchadas.

Pelagio Giménez refirió que su defendida tenía un teléfono de alta gama que su marido le regaló cuando estaban juntos. Sin embargo, descubrió que el GPS estaba activado y la doña era controlada las 24 horas del día.

El hombre sabía todos los movimientos que daba la señora y aparentemente también escuchaba sus llamadas.

La mujer se dio cuenta de que estaba siendo monitoreada porque O. G. siempre le llamaba para decirle que sabía de sus movimientos o simplemente llegaba de sorpresa al mismo lugar para acosarla y amenazarla. Por esa razón cambió de celular y de número.