Ricardo Cáceres es el albañil que durante el tornado en la compañía Guaicá de Santaní rescató a toda una familia, incluida la nena que posteriormente perdió la vida.
Cinco segundos fueron suficientes para que la casa en la que estaba trabajando quede reducida a escombros.
Él, que atinó a colocarse bajo el marco de una puerta, relató: “Primero saqué al señor, luego a la señora, seguidamente al niño y por último a la niña”.
En ese momento la pequeña todavía respiraba, pero falleció camino al hospital. “Yo intenté pedir auxilio, pero vi que todas las casas alrededor estaban por el suelo, al igual que los árboles y las columnas de la ANDE, fue desesperante”, dijo al corresponsal Carlos Aquino.
Brígida Ortiz (57) es una pobladora cuya casa fue destechada por el tornado. Ella estaba con su hija, su nietita y el hijo pequeño de unos vecinos cuando vio volar por los aires sus puertas, sus ropas y hasta la heladera.
Don Sergio Benítez contó que ayer seguía lloviendo y por eso no podían empezar todavía con los arreglos y reconstrucciones.
Hubo 17 heridos
La ministra de Salud, María Teresa Barán, visitó el lugar e informó ayer que 17 personas fueron atendidas en hospitales.
Algunas ya salieron de alta, otras quedaron en observación y una abuelita fue derivada al Hospital de Trauma de Asunción por traumatismo de cráneo.
Colecta
La Facultad de Enfermería y Obstetricia de la Universidad Nacional de Asunción en San Estanislao recibe víveres, ropas, zapatos, cubiertos, sábanas, frazadas, etc. para ayudar a la comunidad. Para colaborar, favor contactar al (0972) 268-130 o al (0982) 658-083.
“Es nuestro final”, creyó
Brígida Ortiz, pobladora afectada contó que una hora antes ya sentían que se venía algo fuerte. Rezó con su familia y cuando llegó el tornado, corrieron a la cocina. “Le dije a mi hija: ‘Este ya es nuestro final’. Pusimos a las criaturas debajo de nosotras y les cubrimos con nuestras espaldas”.
Tras susto, sus hijas no duermen
Sergio Benítez, poblador afectado, todavía no estaba en su casa cuando ocurrieron los destrozos. Su esposa, suegra e hijas sí, y se llevaron el susto de sus vidas. “Las nenas no durmieron en toda la noche”, contó el señor. Les cayeron escombros, pero no sufrieron heridas graves, señaló.
Crisis en Ayolas
El presidente Santiago Peña visitó ayer un albergue de Ayolas (Misiones), ciudad inundada nuevamente por la crecida del río Paraná, y una maestra jubilada fue portavoz de los pobladores para plantearle la necesidad histórica de tener una franja costera.
“Perdimos todo, con cada crecida es así y cada presidente que sube nos miente”, le dijo doña Celia Lambaré. Peña se mostró partidario de construir la costanera, informó la corresponsal Vanessa Rodríguez.