El sueño de toda la vida de Merivone Rocha Moraes, una brasileña treintona, era vestir el vestido blanco de novia y celebrar su boda a lo grande. Hace unos día, lo cumplió, pero no con un hombre, sino con Marcelo, un muñeco de trapo que le hizo su mamá para que “no se sintiera sola”.
La mujer tuvo una gran y llamativa boda con el muñeco, donde participaron sus dos hijos, todos sus familiares, amigos y hasta curiosos que querían ver el insólito casorio. Como en todo casamiento, la mujer dio el “sí, quiero”, brindó con su esposo y luego fueron de luna de miel.
Tras esta velada de amor, la doña contó que se embarazó y que tuvo muy rápido a su primer hijo en la relación, un pequeño muñeco de trapo. “Se parece a su papá", señaló. Ahora está embarazada de nuevo y espera una muñeca.
“Mi sueño era vestirme de novia. Se me ocurrió la idea de hacer la boda para llamar la atención de los programas de televisión para que me ayudaran a conseguir una casa. Quiero ganarme una casa y por eso decidí casarme con Marcelo”, aclaró la mujer tras entrar en el ojo de la tormenta por su boda.
La mujer dijo que Marcelo es muy bueno en la intimidad y que es un muñeco “muy tranquilo”, no le discute y le acepta todas sus peticiones.