La carita triste y hambrienta de un niño, a las afueras de un local de comidas rápidas, derritió el corazón del joven Gilmar Neira que, sin pensar dos veces, lo invitó a entrar y le compró un combo de hamburguesas.
El chico comentó en sus redes sociales que, en la noche del martes, la criatura estaba sentada “afuera de Burger King, pasando hambre y frío. Cuando pasé por su frente, me miró y me preguntó si tenía G. 2.000 para comprar y comer algo (me contó que no comió nada en todo el día). No dudé y le invité a entrar con nosotros”, relató.
En un corto video, se ve al menor feliz por haber saciado su estómago y, sobre todo, por el juguete que estaba en la cajita mágica.
“Nunca está de más dar la mano a otros que necesitan. Uno nunca sabe cuando nosotros necesitaremos de otras personas”, reflexionó.