La moda juvenil siempre trae sorpresas, y esta vez el turno es de los calzoncillos de abuelo, esos bóxers largos y anchos que parecían destinados al olvido ahora volvieron había sido.
Lejos de esconderlos, ahora los péndex los usan debajo del pantalón… pero bien visibles. Se dejan asomar por arriba de la cintura, mostrando el elástico grueso y hasta parte de la tela, como si fuera parte del look.
En redes sociales ya abundan fotos y videos con esta tendencia que divide opiniones: para algunos es “facha retro” y hasta símbolo de rebeldía, mientras que para otros es un despropósito.
La movida nació fuera del país, pero ya se instaló entre los paraguayos. De ser ropa para dormir pasó a convertirse en accesorio de moda, los calzoncillos de abuelo volvieron y, por la pinta, esta vez no quieren pasar desapercibidos.