Aunque su casita era precaria en el barrio San Blas, de Mariano Roque Alonso, para Yoana Estigarribia tener un lugar dónde vivir significaba mucho. Pero en un santiamén el fuego consumió hasta sus ánimos de luchar por ampliar su pequeño refugio.
La joven de 27 años disfrutaba de la tarde del sábado, cuando su concubino, Gaspar Jara Báez (24), llegó del trabajo totalmente borracho y empezaron a discutir. La pelea subió de tono y él la agredió con golpes de puño. Yoana llamó al 911 y el muchacho huyó.
Entonces, ella fue hasta la Comisaría 10ª a hacer la denuncia, momento en que Gaspar volvió y prendió fuego a la casa, en venganza. Cuando Yoana regresó con los oficiales, se llevó la terrible sorpresa. Bomberos de la zona apagaron el fuego, pero la casita quedó totalmente consumida, señaló el oficial Silvio Ruiz.
El hombre huyó, pero horas más tarde lo atraparon cerca del sitio. La fiscala Estela Cardozo confirmó que hoy será llamado a declarar. La joven, por su parte, recibirá asistencia psicológica.