Francisca Ortega (70) fue echada de la villa “Florida”, en Caaguazú, donde viven algunos seguidores del movimiento religioso “Pueblo de Dios”. Lo hicieron solo porque su nuera fue a visitarla con un short. La señora habló con EXTRA y contó las penurias que pasó ahí.
Hace 7 meses, la doña fue a vivir en el lugar, donde le dieron una piecita para dormir y le hacían trabajar todos los días lavando ropas, limpiando y cocinando, sin pagarle ni un guaraní. “Ellos nos dicen que debemos trabajar gratis, para pagar a Dios por nuestros pecados”, relató.
Ortega comenzó a enfermarse, pidió ayuda a los líderes de la comunidad, pero ellos no le creían, por lo que no le hacían caso. Entonces, ella llamó a sus hijos para pedirles ayuda.
“Ellos (por los líderes) no hacen nada sin que se les pague. Por las noches escuchás que las personas enfermas piden socorro y nadie debe ayudarles, más que los líderes. Y, para llevarlos al hospital, deben darle la plata de su tercera edad”, reveló.
Como esclavos
También destapó que los hombres deben trabajar gratis en la chacra prácticamente por un plato de comida y un techo. “Nuestros hijos van a la escuela afuera y ven que los demás llevan para sus recreos y quieren también, pero acá nosotros no tenemos plata y tampoco te dan permiso para salir a trabajar afuera. Nos tienen como esclavos”, lamentó.
En cuanto a las personas que no pueden trabajar, les sirven más poco la comida, que siempre es poroto o arroz quesú, mientras que los líderes comen otra cosa y aparte, en sus casas, no como ellos que hacen olla popular umía.
Libre
Ña Francisca no quiere volver a la villa y se fue a vivir a la casa de su hija, en Amambay. “Solo mis hijos me van a cuidar, porque ahí no te hacen caso y yo ya estoy vieja”, manifestó.