Blas Riveros decidió salir a dar su versión luego de que su exesposa lo denuncie por violencia intrafamiliar y haya realizado otras demandas.
El pelotero prestó declaración ante la Fiscalía y a través de su abogado negó ser violento.
“Con relación a la violencia intrafamiliar, Blas niega categóricamente”, dijo a EXTRA el abogado defensor Andres Casati.
Según relató el letrado, Riveros siempre trató de mantener contenta a su joven esposa, ya que se encontraban en Suiza, solos y extrañaba mucho a su familia.
“Cada vez que él volvía de sus prácticas a la casa encontraba vestidos, carteras, zapatos de diseñadores exclusivos que tienen un alto costo, él nunca le dijo nada porque estaba enamorado y la quería consentir y apreciaba el esfuerzo y el desarraigo de ella de dejar Itauguá para irse con él”, declaró.
Siempre viajaba
Casati aseguró que el pelotero le entregó todos sus bienes a su doña para que ella los administrara y podía volver a Paraguay cuantas veces ella quisiera.
“Persistía el aburrimiento de ella y él le dio carta verde para que visite a su familia en Itauguá, cosa que lo hacía cotidianamente, ella iba y venía y disponía de la totalidad de los bienes, ella compró vehículos con el dinero del matrimonio”, explicó.
Los cuernos
En una de sus supuestas tantas visitas, la doñita conoció a un hombre en su pueblo y comenzó una relación extramarital con él y ya no regresó a Suiza.
“En uno de los últimos viajes, ella tardó más de lo necesario, dejándolo a él solo y abandonado. Hasta que Blas se entera a través de las redes sociales que ella estaba saliendo con otro señor y luego vio en las redes una foto de ella embarazada con las manos de este señor en el vientre”, relató.
Luego de enterarse de esta supuesta situación, Blas habría iniciado los trámites del divorcio que culminó en diciembre pasado.
No sabía
El abogado del pelotero alegó que su defendido desconoce la existencia de un hijo suyo.
“Blas desconoce que tenga un hijo y al desconocer obviamente es imposible pasar la prestación o cuidarlo, en la carpeta fiscal no hemos encontrado ninguna partida de nacimiento ni la sentencia de un juez que obligue a Blas a dar una prestación al menor”, señaló.
La prueba
Ahora solicitarán el ADN para constatar si el menor es suyo o no.
“Si esta señora tuvo un hijo estando ellos casados pudo concurrir a inscribirlo como hijo del matrimonio, si se entera que existe una demanda de filiación va a impugnar y exigir el ADN, si se prueba que es su hijo lo va a reconocer y va a asumir la responsabilidad”, puntualizó.
No tiene sentido
En contacto con EXTRA el abogado de la denunciante aseguró que lo planteado por la defensa de Blas Riveros no tiene fundamentos. “Es una jugada defensiva nada más. Mi clienta está encerrada en su casa, porque están sin dinero y la humillación pública es tremenda”, afirmó Juan Alfredo Delgado.
Según el relato de la joven, el futbolista miente al decir que tuvo una aventura con otro hombre en Itauguá. “Se atrevió a mencionar el nombre de una persona que desconozco absolutamente, con quien supuestamente mantenía algún tipo de relacionamiento, llegué a creer que lo hizo al azar, para encontrar alguna causal para su promoción de demanda de divorcio vincular”, dice la joven que pide que su hijo sea reconocido.
Tres demandas
La exesposa de Blas Riveros planteó tres demandas judiciales en contra del pelotero, violación del deber de cuidado, inclumplimiento del deber alimentario y violencia familiar. La violencia que supuestamente el deportista ejerció sobre la joven habría sido psicológica y económica. “Él ocultó bienes gananciales a su esposa y pide el resarcimiento de todo lo obtenido conforme a la ley. En el juicio de disolución ocultó todos los ingresos para evitar la partición justa”, explicó el abogado de la denunciante, Juan Alfredo Delgado.
Además de que supuestamente todo el tiempo la humillaba frente a sus colegas. “Recibiendo tratos de menosprecio ante sus compañeros del club y de la Selección Paraguaya, como por ejemplo: ‘Buena para nada’, ‘Kuña rei’, todo con un trato despectivo hacia mi persona”, dice parte de la denuncia.