El Franjeado hizo pagar al Trico los platos rotos del clásico, imponiéndose en su casa por la cuenta de 4-0.
Con practicidad y contundencia Olimpia impuso su juego ante un Tricolor que careció de ideas para quebrantar la portería defendida por Azcona, quien fue desempolvado por Daniel Garnero.
El primer grito sagrado de la noche se dio a los 23 minutos gracias a otro que también fue sacado de la galería: Antolín Alcaraz.
Con la desventaja, Nacional salió a empujar, a buscar el empate que no se pudo dar.
En el complemento, el Léka apostó por salir rápido cediéndole el balón al rival que no supo capitalizar sus jugadas.
De esta manera, a los 53’ tras un buen contragolpe orquestado por Camacho, quien habilitó a Roque y este con el arco enfrente, le vio a Ale Silva mejor posicionado, le cedió el gol en bandeja, para el 2-0.
De esta manera el Albo quedó noqueado, sin mucha reacción, a merced del rival que supo administrar la ventaja.
Y para ir cerrando el partido, a los 69’ Néstor Camacho, tras un error infantil en la salida, Roque recuperó la pelota, tocando para Silva, quien cedió el pase a Camacho y este de palomita puso el 3-0 contundente.
Por último y por si todo esto fuera poco, a los 87’ apareció Jorge Recalde, con un cabezazo para sellar el 4-0 definitivo.
MUY CERCA
Dicen que la esperanza es lo último que se pierde, y el Decano se aferra más que nunca a la posibilidad de llegar al pentacampeonato. Con esta victoria quedó en la tercera posición con 35 puntos y a 4 del Ciclón que juega hoy.
Cruzando la media cancha, Nacional suma su tercer juego al hilo sin ganar, frenándose en la sexta ubicación con 24 unidades en la tabla.