Difundir las fotos íntimas de una persona, sin su consentimiento, puede ponerte tras las rejas.
El Ministerio Público advirtió que no solo la persona que da a conocer las imágenes es procesada, si no también todos aquellos que la reenvían por WhatsApp o redes sociales.
El abogado Gunter Krone, asistente técnico de la unidad Contra Delitos Informáticos de la Fiscalía, explicó que la víctima puede presentar una denuncia a partir de una sola evidencia.
Posteriormente, el peritaje informático se encarga de rastrear a los demás implicados. Nadie se salva, incluso, es probable “recuperar” los mensajes eliminados.
“Un ejemplo: Si yo, fiscal, tengo la captura de pantalla de un grupo de WhatsApp donde aparece que tu número reenvió la foto, yo incauto tu teléfono. Se hace un peritaje en laboratorio, y por más que hayas borrado el mensaje, se va a descubrir”, manifestó Krone.
El abogado señaló que los demás miembros del grupo también podrían ser imputados para investigar si volvieron a compartir la foto íntima con sus contactos.
“Es el mismo procedimiento que se realiza en casos de difusión de pornografía infantil. Mediante ese rastreo informático se llega a todos los implicados”, detalló.
El trabajo es minucioso, lento y requiere de muchos recursos, pero no es imposible.
La víctima puede realizar la denuncia en cualquier Fiscalía.
“La investigación puede llevarla un fiscal ordinario, no precisamente uno de Delitos Informáticos. Quien toma la causa después considera si solicitará asistencia de un agente especializado o si precisará del laboratorio forense para resolver el caso”, acotó.
Expectativa de pena
Dependiendo del caso, difundir fotos íntimas sin permiso, son catalogados como delitos de acceso indebido, lesión a la imagen y a la intimidad de la persona. Tienen una expectativa de pena de entre 3 a 5 años de prisión.
Días atrás, el fiscal Édgar Benítez imputó a Maicol Schameltz (21) por robar el celular de una joven y luego difundir por redes sociales las fotos “hot” de la víctima. Maicol extrajo la memoria del celular robado, la colocó en el suyo y desde su teléfono viralizó las imágenes íntimas de la mujer.