Un militar que custodiaba albergues en Ciudad del Este violó sus días libres de cuarentena y visitó a familiares y amigos.
Fue a un velorio en Roque González el sábado y hasta tomó del mismo vaso con su casero. El resultado: mudó el coronavirus a 17 personas y un banco fue cerrado.
“Más allá de que el velatorio está prohibido, lo principal es la imprudencia del militar de haber ido hasta allá, siendo que se recomendó no hacer visitas”, dijo el director de la IX Región Sanitaria, Ángel Galeano.
Todas las 17 personas contagiadas están asintomáticas en sus domicilios, explicó el doctor.
Se trata de un sargento de la 3ª División de Infantería el responsable de tamaño contagio. Cabe mencionar que este caso salpica incluso a los beneficiarios del subsidio de Tekoporã en Carapeguá.
El BNF de esa ciudad anunció que desde hoy se cierra hasta nuevo aviso para todo tipo de transacciones, debido a que una familiar del uniformado estuvo en la sucursal luego de estar en contacto con su pariente.
El director de Vigilancia, Guillermo Sequera, dijo también ayer que el coronavirus “te mata de asfixia, que es una de las peores formas de morir”.
Sostuvo que se va complicando como una neumonía y que es dolorosa para el paciente grave.
Camionero entró a terapia
Un camionero que viajaba constantemente a Chile dio positivo al coronavirus y se encuentra en terapia intensiva en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (Ineram).
El hombre padece diabetes y su cuadro es complicado.
Ya son varios los positivos entre los camioneros, por lo cual el director de Vigilancia Sanitaria, Guillermo Sequera, anunció que a partir del lunes comenzarán a hacer testeos a todos los conductores dedicados al rubro.
Así también, en Alto Paraná, se confirmaron ayer 8 nuevos casos entre los cuales se encuentra una niña de 6 años que se convierte en la primera menor de edad con la enfermedad del departamento.
“Es el contacto de un caso positivo anterior y está en su domicilio en aislamiento”, informó Wilson Ferreira.
Alta carga viral en Central
“Acá nos fuimos a la B”, dijo casi desmayándose la doctora Graciela Russomando, bióloga molecular del Senacsa, al constatar tres casos con alta carga viral en Central.
Señaló que estas personas estuvieron en contacto con otra que vino del extranjero.
“Alta carga viral significa mayor posibilidad de contagio y de desarrollar una enfermedad agresiva. Generalmente este tipo de pacientes son los que llegan de Brasil”, explicó Santiago Insaurralde, director de la Red Nacional de Laboratorios.
Sostuvo que estos tres nuevos casos con alta carga viral son una advertencia a tener en cuenta de ahora en más.
“Es una alarma como el hecho de tener tantos positivos en los albergues. Hay que fortalecerlos para que no se desborde”, concluyó.