04 mar. 2025

“Desde hace más de 8 meses ellos viven de nosotros”

De madrugada, dueña despertaba para cortar las conexiones clandé.

Durante meses, doña Claudia Fretes de Baruja prefirió callar lo que sucedía con sus inquilinas, pensando que en algún momento se calmarían. Pero las agresiones verbales y amedrentamientos continuaron y subieron de tono rápidamente, hasta que sus hijas pillaron lo que pasaba.

Sus inquilinas, para no pagarle el alquiler y la luz, la violentaban. “La verdad que nos avergüenza, la señora le tira piedras a mi mamá, por suerte tenemos rejas en las ventanas”, relató Lidia Baruja, su hija.

Inquilinas violentas

Lidia contó que nunca se habían dado cuenta, pero las inquilinas Lidia Alvarenga y Sonia Galeano, desde hacía tiempo ya le hacían la vida imposible. Una de ellas, que hace 8 años alquila la casa, incluso intentó por todos los medios adueñarse de la vivienda situada sobre la calle Yacaré Valija casi Defensores del Chaco, del barrio 4 Mojones de Lambaré.

Le decía que era terreno fiscal y hasta quiso quitarle por usucapión, una figura jurídica mediante la cual una persona puede reclamar un inmueble demostrando que vivió allí gran parte de su vida. El pleito empeoró cuando las hijas de la doñita se enteraron de todo lo que pasaba. Las inquilinas no solo le debían casi un año de alquiler, sino también varios meses de luz.

Sin medidor

“Mamá llegó a pagar la cuenta de ellas de la ANDE para que no corten. Pagó G. 570.000 más o menos por cada una. Ahí le dije a mamá: vamos a quitarle el medidor”, recordó Lidia.

Pero el remedio terminó siendo peor que la enfermedad y las inquilinas no solo se negaron a pagar, sino que empezaron a contratar electricistas para hacer conexiones clandestinas de la luz.

“Me levantaba de madrugada para cortar el cable que ellos ponían”, comentó al respecto. Hasta que por fin pillaron infraganti a Ever Leoncio Samudio González, esposo de Lidia Alvarenga, cuando contrató a Ricardo Sánchez para que le estire el cable de la luz y el electricista quedó detenido, hace una semana.

Pero las cosas continuaron tensas. Según Lidia Baruja, los vecinos siguen amedrentando constantemente y negándose a pagar. Aseguró que tanto ella como su mamá ya no saben qué hacer para defenderse y exigir el pago a sus inquilinas.

“Ellos hace más de ocho meses viven a costa de nosotros. No pagan el alquiler ni la luz”, lamentó Lidia Baruja.

Contó que Ever labura en un taller mecánico de motos, hasta donde ella una vez se fue, y él le derramó aceite sucio de motor en la cara. “Me dañó el ojo con eso”, dijo la hija de la dueña.

Ligaron multa por sacar medidor

Lidia Baruja aseguró que la situación más lamentable de todo esto es que ella y su mamá tuvieron que bancarse de nuevo una feroz multa por haber sacado el medidor de la ANDE. El monto era cercano a los G. 2.600.000.

“Mi mamá está muy afectada con todo esto, le está causando un daño psicológico muy grande, ella tiene mucho miedo. No podemos ni un cumpleaños hacer acá”, dijo muy afectada.