El pequeño de siete años cruzó la calle y despertó a gritos a su abuela. “Tata, papá le está pegando a mamá”, exclamó llorando el nenito. María I., de un salto se levantó de la cama y corrió hasta la casa de su hija.
La mujer entró directamente hasta la pieza de su hija y se encontró con una espantosa escena. La chica estaba desnuda. El ropero, las cortinas, ropas y otros enseres estaban tirados en el suelo.
“Fue horrible ver a mi hija ahí tirada. Forcejeamos y él me empujó. Me golpee demasiado fuerte”, recordó la mujer.
Se borró
Esa fue la última vez que Pedro Luis Villalba Méndez, de 30 años, entró a la casa de su exnovia.
María comentó a EXTRA que el hecho ocurrió el pasado 27 de octubre en su casa situada cerca de la Comisaría Primera de Pedro Juan Caballero.
Cuando eso, ya hacían ocho meses que I. R. C., había terminado con el hombre.
“No le dejaba a mi hija en paz. En su cabeza no existía esa ruptura. El día en que pasó eso llegó borracho como siempre a eso de las 11 de la noche para dejarle a mi nieto. Ahí le reclamó a mi hija el por qué se bañó a esa hora”, comentó María.
Espantoso
Entonces, la estiró hasta su pieza y, a la fuerza, empezó a desvestirla. “Quería tener relaciones con ella y ella no quería”, refirió la doña.
El hombre la sometió de una forma irracionalmente salvaje. La chica denunció que sufrió torturas en sus partes íntimas, incluso le mordió en su órgano genital causándole terribles daños físicos. La chica tuvo que ser llevada a un hospital.
Pasea frente a ellas
Sin embargo, han pasado casi 22 días del hecho y el autor ni siquiera fue detenido. La fiscal Reinalda Palacios solicitó su captura, pero hasta el momento la policía no ha logrado dar con su paradero, pese a que la víctima y su madre soportan el constante acoso del hombre. “Después de todo lo que pasó siempre pasa frente a casa con su auto y su música a todo volumen”, lamentó María.
Aseguró que incluso siempre las amedrenta, como amenazando siempre con atropellarlas.
Amenazó con sacarle el hijo
I. R., comentó que la primera vez que ella lo denunció años atrás, el hombre la amenazó con sacarle su hijo si le dejaba. “Cuando eso era chico aún. Me decía que me iba a sacar porque yo no tenía condiciones y que si se iba a la cárcel, cuando salga iba a ser peor”, refirió la víctima.
Le controlaba hasta la ropa interior
Doña María manifestó que el prófugo era extremadamente controlador. No le dejaba laburar, compartir con amigas, ni siquiera cruzar la calle para estar con su propia madre. Incluso, mencionó que le controlaba hasta qué clase de ropa interior se ponía. “Le controlaba todo, le decía que no tenía que usar colalé ni ropa muy pegada. Ella me decía que tenía miedo porque él le amenazaba siempre”, manifestó la preocupada madre.