La confirmación del segundo caso positivo de COVID-19 en Coronel Oviedo generó un alarma de miedo y preocupación en un populoso barrio de donde es oriundo el joven de 20 años derivado al Ineram, en la noche del sábado, encontrándose en tratamiento de la enfermedad adquirida en Asunción, mientras se encargaba del cuidado de un tío en el Hospital del Trauma.
El hecho de que el joven haya compartido socialmente con varias personas en los últimos días provocó reacciones de diferentes tipos.
La zona prácticamente entró en cuarentena bajo estricto control policial.
Autoridades sanitarias de la región desde el pasado sábado vienen tomando las medidas de rigor. A unas 10 personas del vínculo familiar les fueron tomadas muestras cuyo resultado se sabría en horas más.
Se teme de un contagio masivo puesto que el joven tardó en notificar su estado a pesar de los síntomas mantenido por varios días.
Un tío está internado en el hospital regional bajo las medidas exigidas por el protocolo a la espera del resultado de laboratorio.
La directora de la V Región Sanitaria, doctora Lorena Ocampos, pidió calma a la población alertada por el caso confirmado.
Vecinos del asentamiento en cuestión esperan medidas sanitarias más estrictas. Sin embargo desde Salud Pública advierten que cada uno debe permanecer en su vivienda esperando indicaciones luego de saber los resultados de análisis en Asunción.
La policía montó guardia en los puntos de entrada y salida al asentamiento de tal forma que las personas eviten la circulación que podría contribuir en el contagio.
Unas 2.000 personas se encontrarían en la zona, que afecta además a otros 4 asentamientos vecinos.