En 2017 cumplió su meta de campeonar con Olimpia.
Sin lugar a dudas es la mejor basquetbolista paraguaya de la historia. Se trata de Paola Ferrari, la deportista de 32 años que inicia el 2018 más fuerte que nunca, luego de lograr destacarse en el viejo mundo.
En diálogo con EXTRA, Pao reveló qué la mueve para seguir escalando. “Lo que me motiva es superarme día a día, desde muy chiquitita me puse metas y objetivos, he ido cumpliendo poco a poco y esa mentalidad me sigue manteniendo al máximo nivel’’, expresó la atleta del Mann Filter español.
El año anterior, pasó de la fantasía a la realidad, pues fichó por el Olimpia y fue campeona con el club de sus amores. “Sin duda, vestir esa playera fue muy lindo y el cariño que recibí de todos los hinchas desde el primer día fue especial. No me di cuenta, hasta que estuve dentro del club, lo grande que es y lo que significa defender esos colores’’, subrayó la “lujosa Ferrari”.
Gran momento
Actualmente, Pao cumple su segundo ciclo con el equipo del Stadium Casablanca, donde consiguió una histórica clasificación a la Copa de la Reina y se ubicaron cuartas en la liga.
Vestir la playera de Olimpia fue muy lindo, el cariño recibido fue motivador”Paola Ferrari, basquetbolista paraguaya.
Hace poco más de dos años, cuando recién fichaba por el elenco zaragocés, entre compañeras jugaron al amigo invisible. Pao se llevó una verdadera sorpresa cuando una norteamericana que no entendió muy bien en qué consistía el juego, le dio un regalo bastante particular.
“Todas comprando regalos súper lindos, me toca abrir el mío y era una gorra de ducha, sí, la de plástico de toda la vida. Me quedé con una cara de no saber si reírme o llorar, las demás no podían con la carcajada”, recordó entre risas la compatriota.
Se sabe que la basquetbolista es una ídola y muchas sueñan con jugar como ella. Para la atleta, ser un espejo para las más chicas la llena de orgullo y resulta halagador.
Por último, adjuntó que solo le queda cumplir un anhelo, que es el de conseguir una medalla con la Selección Paraguaya.