Recordado por muchos como un maestro, símbolo del periodismo deportivo paraguayo, Edgardo Villalba Viccini fue, indudablemente, uno de los mejores en el rubro informativo. A casi 25 años de su fallecimiento, su legado sigue intacto en las mentes de quienes tuvieron la posibilidad de compartir con él.
Paola Villalba, hija del extinto periodista, recordó a su padre como una persona que dejó una enseñanza trascendental. “‘Vivir con la conciencia tranquila no tiene precio’, decía siempre luego de que Stroessner le ofreciera cargos diplomáticos en el extranjero”, señaló al tiempo de resaltar que admiraba la manera de hablar de su papá.
Villaba Viccini fue figura de Deporte Color y Al Rojo Vivo, en el SNT y en Radio 1ero. de Marzo. Además llegó a jugar en el club Libertad.
“Hace unos años, mi amigo Enrique Sánchez me envió una foto del pase de mi papá por el club Nacional, nunca nos contó sobre eso”, reveló.
Ninguno de los hijos se inclinó por el periodismo, Paola es abogada, Leticia es chef, y su hermano Edgardo se dedica al comercio.
“Creo que el aporte más notorio de mi padre fue el profesionalismo, la ética, el lenguaje y su conocimiento. Hace 25 años que falleció y la gente le recuerda con esas cualidades”, expresó.
Para Paola, la diferencia entre el periodismo deportivo de hace 30 años y el actual es la pasión con que se ejercía. “Creo que la dupla que hacía mi papá con Carlos Alberto Gómez es insuperable hasta hoy”, agregó.