“En Olimpia hay una exigencia de los hinchas de ganar la Copa Libertadores, pero no es fácil lograr eso”, señaló Sergio Orteman. El charrúa admitió que su ciclo como futbolista del Decano llegó a su final. Sergio Orteman se ha ganado el cariño de los hinchas de Olimpia, a base de buen fútbol e importantes conquistas, como aquella Libertadores de América de 2002. El charrúa salió campeón del Clausura con el Decano en 2011 y al año siguiente no tuvo una buena salida por un acto de indisciplina en la concentración.
Gerardo Pelusso, DT del Expreso de aquel entonces, no lo perdonó a él ni a Vladimir Marín y Adrián Romero: ordenó que ya no sigan en el club. “Nos equivocábamos al estar tomando, pero no nos escondíamos”, reveló ayer el uruguayo en el programa “Tiempo de juego” de la 970 AM.
“Siempre nos reuníamos en el mismo lugar, era al lado de donde almorzábamos”, recordó. Orteman también rememoró la obtención de la Copa Libertadores con la Franja. “Eliminar a Boca, que era el bicampeón de la Libertadores, fue importante para nosotros.
Cuando me tocó chutar el penal (en la final ante São Caetano) no me temblaron las piernas, y eso que tenía 23 años”, indicó. El exvolante franjeado se acordó además, de la final de la Copa Intercontinental ante el equipo “merengue” en Japón (Olimpia perdió 3-0). “Cuando le queríamos dar una patada a algún jugador del Real Madrid, ya pasaban la pelota. Fue lindo jugar contra el Real, pero hubiera sido más lindo ganarlo”, señaló.