11 dic. 2024

Neymar, el rey de oro que rompió el maleficio

Neymar lloró de felicidad luego de anotar el penal decisivo que otorgó la medalla de Oro a Brasil. Neymar lloró de felicidad luego de anotar el penal decisivo que otorgó la medalla de Oro a Brasil.

La historia de Neymar en los Juegos Olímpicos de Río 2016 podría ser tranquilamente el guión de una película de superación en Hollywood. El N° 10 de la Verdeamarelha arrancó como la insignia de su selección, pero dos empates seguidos en la fase de grupos causó el enojo de los torcedores. La imagen más llamativa fue la de un niño que decidió rayar el nombre del astro brasileño y escribió abajo la de Marta, capitana de la selección femenina.

Ayer, ante un Maracaná abarrotado, Neymar se acomodó, respiró hondo y definió con clase para anotar su nombre en la historia grande del fútbol brasileño. Justo antes, Weverton había parado el penal de Petersen y el tanto del N° 10 rompió el maleficio del mítico estadio y regaló a Brasil el título que tanto anhelaba, el único que le faltaba, el de los Juegos Olímpicos. Esa presea que ni los Rivaldo, Ronaldinho Gaúcho, Ronaldo o Romario, entre otros, pudieron conquistar.

Poesía “neymariana”

En tiempo normal, el juego terminó 1-1. Neymar, con una verdadera poesía de tiro libre, adelantó a los anfitriones a los 26 minutos. Pero Alemania, que se pasó pegando durante todo el partido, encontró la paridad a través de Maximilian Meyer a los 59 minutos.

En tiempo de descuento no pasó mucho y la lotería de los penales sonrió a Brasil 5-4. Los locales se colgaron la presea dorada, Alemania se tuvo que conformar con la de plata y la de bronce terminó en poder de Nigeria, que venció a Honduras 3-2 por el tercer puesto.