Juan Ángel Napout quiere gritar a los cuatro vientos que es inocente. Por eso decidió aceptar ser extraditado a EE. UU., para afrontar ante la justicia norteamericana los cargos de corrupción (soborno, lavado de dinero, etc.) que pesan sobre él.
El todavía titular de la Conmebol y vicepresidente (suspendido) de la FIFA, tras la asesoría de sus abogados, renunció a su derecho de tener una audiencia ante las autoridades judiciales de Suiza “para poder confrontar directamente las acusaciones ante la justicia norteamericana”, señala un comunicado de la defensa, cuya oficina se encuentra en Boston (EE. UU.).
La nota también señala que Napout está “seguro de su inocencia” y que, desde su asunción como vicepresidente de la Conmebol en 2013 y presidente en 2014, “se ha dedicado a la promoción y la institución de la transparencia y la reforma”.
Napout deberá viajar a Norteamérica en el plazo de 10 días. “Su arresto es contrario a todas sus acciones pasadas y el señor Napout no sólo manifiesta firmemente su inocencia, sino que también tiene la intención de luchar contra estas infundadas acusaciones”, sostienen sus abogados.
Lo que dice la defensa:
-Napout afrontará directamente las acusaciones ante la justicia norteamericana.
-Desde que asumió en la Conmebol, Napout ha promovido acciones de transparencia en la entidad.
-El directivo paraguayo apoyó la eliminación de la ley que “blindaba” la sede de la Conmebol.
-Napout afirma ser inocente y expresa su deseo de luchar contra las “acusaciones infundadas”.
-Bajo su administración, la Conmebol pagó el seguro social a los empleados en Asunción.