En el club 24 de Junio de San Juan Bautista, Misiones, juega un mitã’i que como muchos se ilusiona con ser una estrella de fútbol.
Lo que Freddy Junior Aguilera quizá no dimensiona, es que con apenas 8 añitos ya comenzó a brillar con luz propia gracias a su talento de definidor innato. “Mamá, por cada gol me vas a comprar un pancho y una coca”, ese el precio que en medio de su inocencia pone el crack por sus obras de arte dentro del campo de juego.
“Me considero una mamá botinera tóxica, porque grito tanto que toda la cancha retumba cuando mete goles”, dijo a EXTRA Mariela Rivarola, mamá del talentoso pequeño. Contó que su hijo desde chiquito está acostumbrado a los grandes desafíos porque le ha tocado enfrentar a chicos mucho mayores que él.
Logros
En su corta pero muy fructífera carrera, Freddy ya conoce el dulce sabor que tienen los trofeos.
“Junior, es jugador del Club 24 de Junio, se fichó cuando tenía 4 años en el año 2018, ese mismo año jugó en la Sub 6, salieron campeones en esa categoría. Ya en el 2019, fue a préstamo al club 1ro. de Enero, ese año volvió a consagrarse”, comentó.
“En el 2021, volvió al 24 de Junio integrando la Academia, tenía 7 años, pero jugó en la categoría 2012. También ese año integró un torneo local organizado por una cooperativa donde sacó campeón a su equipo. Este año volvió a la Academia, donde nuevamente está logrando su propio espacio. Le hizo goles a Guaraní, Gral. Díaz, clubes de Lambaré. En el torneo departamental es uno de los goleadores. En 7 fechas ya acumuló 10 tantos, de los 13 que tiene en total esa categoría”, detalló orgullosa Mariela.
Comprometido
Ordenado, disciplinado y sobre todo apasionado del balompié, el prodigioso diestro sueña con darle lo mejor a su mamá. “Dice que va a jugar en Olimpia y que cuando eso pase, a su hermana y a mí, nos comprará la casa más linda”, reveló la mujer. Agregó por último que su retoño se pasa viendo videos de las técnicas que usan otros niños, en su intento por perfeccionar su pegada.