Hace días no puedo ni dormir de los nervios.
Estoy hace varios años con mi pareja, ya van a ser cinco años. Resulta ser que descubrí que ella escribe con varias personas en redes sociales y me duele muchísimo.
Me entró la duda del porqué ella está queriendo salir más con sus amistades nomás y ya no comparte casi conmigo.
Entonces cometí el error de revisarle el celular. Sé bien que “el que busca encuentra”, pero no me aguanté. Ella justo se fue como para bañarse cuando su celular se prendió, o sea, recibió una notificación y no se había bloqueado la pantalla. Se le olvidó, porque siempre pone boca para abajo su cel o bloquea para que yo no vea luego nada. Entonces deslicé mi dedo y vi que era un mensaje directo de Instagram, pero era de esos mensajes “modo efímero”, o sea, el mensaje desaparece cuando leés todo y salís del chat. Entonces vi que decía: “¿Cuándo te voy a volver a ver? Estabas muy linda”.
Un día antes, ella me dijo que se iba a la casa de su compañera de trabajo porque iban a festejar que a una de ellas se le ascendió.
Entonces hice captura de pantalla y me mandé a mi número. Al entrar a WhatsApp me saltaron los “más usados”, entre ellos encontré mensajes sugerentes por parte del mismo tipo, pero ella le contestaba con emojis nomás. Vi unos cuantos mensajes donde siempre le piropeaba o le decía que parecía que estaba argel, que él le podía ayudar a mejorar su día y eso. Me molestó porque ella en ningún momento no le paró el carro y le dijo que tenía novio. Le daba pie a que continúe con sus insinuaciones.
Entre las conversaciones también encontré el chat de otro personaje, que no sé de dónde le conoce. Ella le mandó una selfie desde su lugar de trabajo, un call center. Y éste le respondió con un sticker.
“Yo no le Fallé”
Cuando salió del baño le encaré y le pregunté qué significaba todo esos mensajes. Ella primero comenzó a temblar, se puso muy nerviosa y me quería quitar el celular. Le di, pero le seguía preguntando. Ella dijo que eran mensajes nomás y que ese que le quería ver se fue también en la farra de los compañeros que hicieron, pero que “siempre nomás luego le escribe en ese tono” y que al otro que le mandó la selfie es su “kape”.
Muchas veces tuve la oportunidad de fallarle, pero no lo hice por respeto y lo que me está preocupando es que últimamente sale mucho, no quiere estar más en la casa solo salir con sus amistades “disfrutar de la vida” como ella dice.
No sé cómo enfrentar mi situación. ¿Se puede decir que me fue infiel?
La respuesta de la psicóloga Rocío Paredes:
La infidelidad es romper un acuerdo tácito de exclusividad, pero con el auge de la tecnología habría que replantear nuevas cláusulas en “el contrato”. Lo que para vos puede ser una traición puede que para la otra persona, no.
Lo ideal es verbalizar, decir lo que se quiere y espera del otro. Afrontar la situación requiere tener “la cabeza fría”, apostar a una conversación abierta expresando tus emociones. Uno se nubla ante el miedo de una posible infidelidad y empiezan los reclamos, no aportan nada constructivo a la relación. Ambos deben hacer el análisis de qué están haciendo para que la relación florezca.
