05 jul. 2025

Lo lamento, estoy de buen humor

@uruser @uruser

Insólitamente, hace dos días que estoy de buen humor. Es más, hasta me voy con ganas a trabajar (algo no tan común en mí). Así, teniendo en cuenta esto, me resisto a hablarles del sospechoso método de enseñanza empleado por un foráneo profesor de teatro, que consistía, básicamente, en “garrotear” a su alumna para “quebrarla” (acotación al margen, averigüen bien con quién envían a sus hijos a aprender danza, inglés, fútbol o lo que sea... hay muchos locos dando vuelta).

Tampoco les hablaré de las “1.000 viviendas de la discordia”, ese emprendimiento de la Senavitat que promete construir un edificio cada tres días en el RC4 para terminar en menos de un año. Sensibilidad social o interés político, esa es la disyuntiva (no opinaré, ya saben que estoy de buen humor).

Por supuesto, que no abusaré de mi estado de ánimo para comentarles que los nueve agentes de la Senad que participaron del grotesco operativo que terminó en la muerte de la niñita de tres años, dieron negativo a la prueba de residuos. Seguirán las investigaciones, dicen. ¿Tendremos culpables? Tampoco les hablaré del adolescente de Villa Hayes que murió por un cuadro respiratorio porque no encontraron terapia.

Terminado ya mi segundo día consecutivo con mi ánimo en alza, me doy cuenta que llegamos a la mitad del año. Transitando ya esa época de la vida en la que te parece que el tiempo va más rápido y mientras escucho a los díscolos y rebeldes rockeros de mi juventud en los parlantes del súper, pienso que quizás me siento de buen humor porque estoy haciendo cosas nuevas, metiéndome en proyectos con los que pude soñar y no se me habían dado y retándome todos los días.

Quizás sea porque mis metas del año, escritas hace seis meses, comienzan a tomar forma, a hacerse más tangibles. ¿Y las tuyas?¿Dejaste el pucho, bajaste de peso? Majo... ¿hiciste la tesis? Dahia... ¿defendemos en julio? Y mis disculpas dire, por esta columna medio livianita de hoy: es que estoy de buen humor. Siempre habrá oportunidad de tiempos peores.