05 mar. 2025

Felices en un Paraguay golpeado

@feryirobles @feryirobles

Así como siempre andamos quejándonos de lo lamentable del sistema de nuestro país, sumido en la inoperancia y la corrupción, también siempre nos encargamos de rescatar las características que hace hermoso vivir en esta tierra guaraní, y lo defendemos a morir. Sus ricas tradiciones por ejemplo, nos hacen únicos en el mundo y qué orgulloso nos sentimos al presumirlo.

Es tan emocionante ser parte de cada una de las actividades de las familias paraguayas que conservan esa esencia. Esta semana se celebró una de las mayores fiestas cristianas, la Semana Santa hecha de una combinación de celebraciones religiosas y tradiciones propias de nuestra cultura.

Desde la bendición de las palmas, miles de paraguayos empezaron a hacerse parte de lo tradicional. Todas las familias se movilizaron para adquirir los elementos necesarios para preparar los alimentos, otros partieron rumbo al interior, donde los vecindarios se envuelven del sonido de los morteros preparando la harina de maíz.

Actividad en donde participan todos los miembros de las familias en un ambiente armónico y festivo, sin faltar los chistes, los relatos, las bromas, siempre considerando el ambiente reflexivo de estos días muy respetados sobre todo por los más adultos. Se debe guardar el mayor silencio, nadie debe gritar o hablar fuerte. Tampoco se debe correr y los niños tienen prohibido jugar.

Por cuatro años consecutivos tuve la oportunidad de participar de cerca de la tradicional procesión en Tañarandy. Las miles de velas ubicadas a lo largo de un sendero junto con antorchas encendidas, nunca se van a borrar de mi mente, y sobre todo después de conocer el minucioso trabajo de los artistas que cada año preparan ese espectacular ritual, que deja anonadados a miles de turistas del país y del mundo.

Y por supuesto, este domingo, todos iremos a la casa de los padrinos para recibir un golpe en la nalga a cambio de un chocolate. Cosas tan sencillas, para ser felices en un Paraguay golpeado.