
Esta semana se publicaba que el Ministerio de Industria otorga un bono de 38.500 guaraníes por día, para almuerzo a sus funcionarios, sin importar cargos ni salarios (algunos, incluso, con casi 20.000.000 de sueldo). Pero, si te vas a asombrar, leé lo que sigue: el Ministerio pone, además, a disposición de los trabajadores tres vehículos, para que sean trasladados desde sus oficinas hasta el restaurante asignado para el almuerzo.
Pocas cosas ya nos asombran, pero esta, raya la burla. Es dinero que sale de nuestros impuestos. De tu bolsillo, incluso de esa gente que hace magia para pagar el pasaje de los chicos para ir a la escuela, y que hoy quizás no tengan almuerzo escolar porque el dinero del Estado “no alcanza.”
La justificación fue una bofetada. El MIC argumenta que el almuerzo gratis motiva y fomenta el compañerismo. Eso lo sabe Juan, mi vecino. Barriga llena, corazón contento. Pero Juan tiene que salir a ganarse el pan, muchas veces sin desayunar y confiado en que un compañero le preste algo de dinero para el pasaje y llegar a su casa con un kilo de galletas para sus hijos. Esa es la realidad.
Un estudio de la Central Nacional de Trabajadores revela que, una familia de cinco miembros, gasta para todos en almuerzo unos 35.000 guaraníes diarios. SÍ, 35 MIL PARA CINCO PERSONAS. Esa es la realidad del común de la gente.
Pero el Ministerio de Industria es solo una muestra. El robo se multiplica y nos desangra. La semana pasada, el Ministerio de Hacienda destinaba 9.000 millones, NUEVE MIL, a sus funcionarios como “primer aguinaldo” (tienen tres) y conste que existe una evasión de entre el 30 y el 40%.
En estos últimos meses no solo descubrimos que les pagamos sus viajes, sus “secretarias privadas” sus vehículos lujosos y sus propiedades, sus empleados personales y suS combustibleS, también les pagamos la comida mientras nos roban la esperanza. Ellos van por el nuevo rumbo, nosotros por el mismo camino.