04 mar. 2025

“El himno, el árbol y el bosque”

@marianonin1 @marianonin1

Por decreto, el Ministerio de Educación estableció la obligatoriedad de la entonación del Himno Nacional todos los días en todos los niveles del sistema educativo, y concluye advirtiendo que el incumplimiento será considerado como falta pasible de sanciones disciplinarias. Y se desató la polémica.

Creo que cantar el himno no nos hace más patriotas, no hace a los jóvenes buenas personas o los aparta de los vicios que hoy por hoy inundan todo. Sucede que de la “obligatoriedad” están cansados los estudiantes. De las imposiciones sin sentido que no hacen más que revelarlos en una etapa de sus vidas en que, justamente, ese es el problema: renegar de todo y todos, y en casos, con justa razón.

Se los obliga a cantar el himno en instituciones derruidas donde la educación es deficitaria y mediocre, sorteando el peligro para construirse el futuro. Muchos subestiman a los jóvenes, mientras descubrimos que quieren un país mejor, un cambio necesario. “Nos quedamos mirando el árbol y no vemos el bosque”

La educación pública está catalogada como una de las peores del mundo. Docentes enseñando cosas que ni siquiera entienden, para alimentar un sistema que construye una generación mediocre para competir en un mundo globalizado y exigente que no da tiempo a segundas oportunidades. Lo primero debería ser rectificar el sistema y adecuarlo al mundo. El mercado lo exige.

Creo que el amor a la patria se enseña primero en la casa. Es importante enseñar a nuestros hijos que honrando los símbolos patrios se fortalecen las raíces, y con buenas raíces se hacen buenos ciudadanos, buenos patriotas. Cantar o no es secundario. No se ama ni se respeta más cantando. Eso se hace con valores y buena educación.

La opción al final es de cada uno. Muchos cantan el himno mientras te meten la mano en el bolsillo. Eso señores… es mala educación, o qué?