¿Sabías que una mujer a lo largo de su vida gasta 5000 dólares en productos de higiene femenina?
Parece una locura pero muchas mujeres no pueden acceder a estos elementos básicos para su vida cotidiana debido a la pobreza extrema. Se estima que en el mundo dos de cada cinco niñas en edad de menstruar pierden un promedio de cinco días escolares al mes por no tener las instalaciones necesarias en las escuelas y acceso a los elementos de higiene femenina.
Las políticas de salud pública deberían ocuparse y proveer de manera gratuita copitas menstruales, toallitas higiénicas o tampones, permitir que las mujeres elijan cuál es el adecuado para ellas.
Las copitas menstruales serían una solución viable y amigable con el medio ambiente, a lo largo de su vida una mujer utilizaría 8 copitas. Otra solución ecosustentable sería proveer de toallitas de tela, que son lavables y reutilizables.
Los tampones y toallitas además de ser costosas, generan toneladas de desperdicios de gran impacto en la naturaleza. Las copitas y las toallitas de tela podrían cambiar la vida de cientos de mujeres en nuestro país y dignificar sus vidas, ya que para muchas mujeres menstruar significa dejar de ser productivas por falta de acceso a los elementos de higiene.