Según el Diccionario de Música del Paraguay (Luis Szarán, 1997), “Purahéi kele’e” es toda canción nacional compuesta con el fin de entonar loas a obras de Gobierno o exaltar “virtudes” de políticos. Se basa en la adulonería, en el cepillerismo. Sus orígenes se remontan al siglo XX y, claro está, encontró su lugar en el mundo en el régimen de Alfredo Stroessner.
Una de las célebres piezas musicales de este estilo afirma que el General tiene un “corazón de acero”, por ejemplo. Ya en pleno siglo XXI, aún hay vestigios de aquellos retrógrados pensamientos. Irónicamente, el Purahéi kele’e “2.0” tiene lugar estos días en Ciudad del Este, que antes de la llegada de la era democrática llevaba el nombre del mismísimo “Rubio”.
En el Centro Educativo Municipal (CEM) los alumnos venían cantando, al menos tres veces por semana y en la formación, una especie de “himno” que rinde culto a la personalidad de la intendenta Sandra McLeod y su marido Javier Zacarías Irún, extitular de la comuna. La pareja, que no es de barro, es idolatrada por muchos habitantes esteños. Claro está, sus detractores también son en gran número.
El profesor Justo Pastor Piñánez es el autor del “hit” que, en sus letras, dice que “con McLeod-Zacarías, Ciudad del Este es un edén”. Su composición fue una especie de regalo al CEM (dependiente de la muni) por sus 15 años de vida. Ayer, el músico defendió a capa y espada su trabajo.
Al tiempo de asegurar que jamás pensóen idolatrar a ambos políticos, admitió ser un “chupamedias”. Ah, y la directora Teresa Ozuna dijo que la “música pega y les gusta a los chicos porque arenga a luchar contra la ignorancia”. Profe, vamos na: no tiene ni pies ni cabeza esta deducción.
En la escuela hay cuadros en que se ve a Sandra junto a niños, en una clara demostración de culto a su personalidad. Así como Stroessner en su momento, la mandamás de CDE aceptó con beneplácito el cepilleo. No obstante, ya prohibió que se cante su himno. Claro, esto fue después de que la prensa haya publicado la desfachatez que se perpetró en esta institución educativa. Lo peor es que hayan utilizado a criaturas en esta patética propaganda. Su contenido, desde cualquier punto de vista, es reprochable. Ya tú sabes.