@feryirobles Una fecha en la que se debió agasajar a los pilares de la construcción de un país, se convirtió en motivo de no celebración. Las condiciones laborales en las que se encuentran los docentes no son las más ideales y óptimas para el desarrollo de las actividades en los salones de clases.
¿Hasta cuándo un país puede soportar que uno de los profesionales más importantes que tiene la sociedad siga insistiendo en que no tiene nada que celebrar, por las condiciones pésimas en las que se encuentran tanto el entorno educativo, infraestructura, remuneración y seguridad social que está en deuda con el trabajador?
Cada año nos quedamos asombrados por los resultados de las evaluaciones a docentes, que concursan a cargos para el sistema educativo, ya que un alto porcentaje termina aplazándose. Y tal vez, muchos docentes no cumplen con los requisitos por la falta de entrenamiento. A eso se suma, que cada vez menos personas están interesadas en la profesión; muy pocos eligen la carrera por el casi nulo apoyo del Estado. Hoy tampoco existe un salario básico profesional docente, algo que el sector viene peleando hace bastante tiempo, ya que ahora solo cobran el salario mínimo.
Mientras este es el panorama, en el Ministerio de Educación estuvieron haciendo un festín de adjudicaciones millonarias, con la propia ministra al frente. Marta Lafuente, que hasta el último momento está siendo protegida por el presidente de la República Horacio Cartes.
Afortunadamente todo esto fue descubierto, y los mismos alumnos siguen exigiendo entre varias cosas, principalmente una mejor educación, de la mano de docentes capacitados, y motivados. Para todo esto, exigen, y con justa razón, que Lafuente sea apartada. En la persona de todos los luchadores, los educadores activos y los que durante toda su vida se dedicaron a educarnos, saludamos a los docentes en su día, esperando que pronto pudieran celebrar su día.