28 abr. 2024

Cómo no gastar la vida con el aguinaldo

@ruthbenitezdiaz @ruthbenitezdiaz

Es la palabra que más ansiedad genera en esta época consumista del año. Y aunque recibir el doble del salario acostumbrado puede hacer perder la cordura a cualquiera; existe un secreto para aprovechar esa plata de la mejor manera, sin tener que gastar la vida.

La clave está en seguir viviendo como todos los meses. Nos pasamos pensando todo diciembre o incluso desde antes en cómo gastar nuestra “minifortuna”, cuando lo más conveniente es precisamente no pensar, olvidar que ese dinero existe. Salvo excepciones de casos urgentes como; deudas importantes que no pueden ser fraccionadas, la salud o los hijos.

La peor manera de usar el aguinaldo es a través de los “gastos hormiga”, que son las pequeñas compras innecesarias que sumadas pueden totalizar un monto mayor al propio aguinaldo. No debemos confundir el hecho de darnos pequeños y merecidos gustos con el despilfarro. No creas en el black friday. Compra solo lo que necesitas.

El mercado nos agobiará con sus ofertas navideñas, de fin de año, de reyes y luego enero nos encontrará más secos que guiso quemado. Al gastar por cosas innecesarias que no nos hacen felices, perdemos la libertad, nos volvemos esclavos.

El expresidente uruguayo José “Pepe” Mujica, querido por unos y odiado por otros, no pudo ser más oportuno y certero: “Inventamos una montaña de consumo superfluo y hay que tirar y vivir comprando y tirando. Y lo que estamos gastando es tiempo de vida, porque cuando yo compro algo, o tú, no lo compras con plata, lo compras con el tiempo de vida que tuviste que gastar para tener esa plata, pero con esta diferencia: la única cosa que no se puede comprar es la vida. La vida se gasta y es miserable gastar la vida para perder libertad”.

Hoy, solo por hoy, no pensemos en cómo gastar, sino en aquello que necesitamos, que nos relaja, que nos hace reír, que hace feliz a nuestra familia, que nos hace bien. Que el aguinaldo, fruto del esfuerzo del año, compense y valga, porque lo importante no es la plata, sino la vida.