Como la niñera no había regresado a trabajar, Claudete Carbonera Locks, de 42 años, se acercó el martes 4 de noviembre a la Subcomisaría 3ª del barrio Santa Ana, de Ciudad del Este.
La mujer denunció la desaparición de Thamara Celeste Arias Chaparro, de 20 años, su empleada.
Según la patrona, desde el 31 de octubre, Thamara no se presentó a su lugar de trabajo. En un primer momento, la joven le contestó por WhatsApp que estaba en Asunción y que no podía atender llamadas, pero luego dejó de responder.
Preocupada, la patrona decidió ir personalmente a la casa de la joven para verificar la situación. Allí, una vecina le comentó que Thamara había salido con una amiga y que planeaba ir a Brasil, hacia San Pablo. Claudete también mencionó que la joven tenía un novio, Alejandro, quien, según la patrona, controlaba todos sus movimientos, revisaba su celular, no le permitía manejar cuentas bancarias y administraba su sueldo. Hasta ese momento, la mujer desconocía el paradero exacto de Thamara.
Tras la denuncia, personal del Departamento de Búsqueda y Localización de Personas, encabezado por el comisario principal Rubén Ramírez, se fue ayer a la vivienda de la patrona para obtener información.
Por mensaje
Durante la visita, Claudete recibió un mensaje de Thamara, quien le dijo que no podía atender llamadas ni usar su celular, que estaba lejos y que no pensaba regresar a trabajar.
El comisario Ramírez contó a EXTRA que en ese mismo momento lograron hablar con Thamara y ella les dijo que se encontraba en San Lorenzo.
“Nos dice que era muy absorbente esta señora, que le controlaba mucho, que no le daba permiso, que le pedía ubicaciones donde estaba y todo eso, y que no se sentía de gusto con ella. Por eso salió de ahí”.
Ramírez agregó que Thamara aseguró que tiene previsto regresar este viernes a Ciudad del Este para presentarse en la comisaría y levantar la denuncia por desaparición. “Nosotros ya la tenemos prácticamente ubicada, pero vamos a esperar este viernes para que pueda venir a presentarse y levantar definitivamente su búsqueda”, explicó el jefe policial.
Sin embargo, hasta el momento, la causa sigue abierta.“El caso no está cerrado aún”, indicó Ramírez.
Reciben maltratos: Domésticas pasan de todo.
Higinia Vázquez, del Sindicato de Trabajadoras Domésticas, señaló a EXTRA que es la primera vez que escucha un caso así.
Contó que es común que las patronas llamen o hagan videollamadas para preguntar cómo está su hijo.
Sin embargo, advirtió que si esas llamadas se realizan fuera del horario laboral, ya no son apropiadas. Además, Vázquez destacó que muchas trabajadoras domésticas enfrentan distintos tipos de maltratos, incluyendo agresiones físicas (se les pega), no se les paga lo que corresponde. Algunos incluso pagan muy poco, por ejemplo: G. 300.000 o G. 600.0000 mensuales.