La tristeza invadió toda la comunidad de Romero Cué, Pedro Juan Caballero, en el último adiós que dieron esta mañana a la niña de tres años asesinada presuntamente por un adolescente de 17años.
La caravana de vehículos, motos y gente a pie alcanzaba aproximadamente 4 cuadras. Partió del asentamiento hasta el cementerio San Carlos, del barrio General Genes. Un carro de bomberos adornado con globos blanco les acompañó. Muchas personas vestían remeras con la cara del angelito y lloraban clamando justicia por ella.
El cuerpo de la nenita llegó en la madrugada de este lunes desde la morgue judicial, donde se le hizo la autopsia.
Según el médico forense Pablo Lemir, la víctima tenía rastros de abuso sexual pero la causa de muerte todavía está en estudio y los resultados estarían listos dentro de algunas semanas.
El fiscal José Luis Torres imputó a un adolescente de 17 años por homicidio doloso y a la madre de la criatura como supuesta cómplice, porque según versiones, habría entregado a su hija a cambio de droga.
Ayer en horas de la tarde, una turba de vecinos furiosos incendió por completo la casa que funcionaba como “boca de fumo”.