Comúnmente la mayoría de las personas le tienen miedazo y hasta asco a los sapos. Este no es el caso de Ana Díaz, una animalera de Ñemby, que tiene como mascotas no solo a uno sino a tres de estos hogareños anfibios.
“Son una familia y desde hace 5 años les tengo. Señor Cabrera, señora Cabrerita y Junior Cabrera son sus nombres, son divinos, muy amorosos, para mí son animales que merecen respeto”, contó a EXTRA la conocida rescatista de gatos.
Mencionó que los animales tienen su casita debajo de unas tablas de palets, ya que les gusta la humedad. “Ellos conviven con gatos, son buenitos, se quedan para que le toques si les das confianza”, agregó la doña.
Ana indicó que señor Cabrera es el más letrado, ya que le sonríe a las visitas que tienen. “Ellos no molestan a nadie, solo les gusta la humedad. Comen purina para gatos cuando salen de noche”, alegó.
Señaló que la pareja de sapos ya tuvo muchísimas crías y que pobló de sapos todo su barrio, y que solo Junior Cabrera se quedó con sus papás hasta el momento.
“Mucha gente dice que son feos, pero para mí son hermosos, son seres muy buenos, solo hay que aprender a apreciar sus bellezas”, acotó la mujer.
Está de moda
Lourdes Mereles, de Fernando de la Mora, comentó que también tiene dos sapitos a quienes cuida y da de comer desde hace 3 años. “Ellos no molestan ni arman ruido como los perros y gatos, son tranquilitos y solo salen a comer a la noche”, refirió. Resaltó que muchos de sus amigos por eso los están prefiriendo como mascotas.
Doña Lourdes Rojas, de Ybycuí, dijo que los sapos “atraen el dinero” y es por esto que son cuidados y protegidos por sus hijos y nietos en su casa.