Damasio Medina (50) es un ejemplo de vida. Nació solo con dos dedos en cada mano, a los 13 años perdió casi completamente la vista, pero eso no le detuvo en nada. Diariamente carga hielos y los ata como si tuviera todos los dedos.
“Ocho segundos es lo más lento que tardo en atar”, pureó el señor que vive en la comunidad 4 de Mayo, lado este de Capiibary, San Pedro.
Su video se hizo viral en las redes sociales.
Contó que desde niño comenzó a trabajar, haciendo y vendiendo heladitos de refrescos. “Al día cargaba y ataba 3.000 unidades de helado, no había alguien más rápido que yo”, aseguró.
La falta de sus dedos nunca le impidió hacer lo que quería, pues iba a la chacra a cultivar y cosechar mandioca, techaba las casas con el famoso kapi’i, como cualquiera.
A los 13 años perdió la visión, según dice, luego de que un sapo le orinó en los ojos. “Yo entré a bañarme, ahí estaba un sapo, le toqué con un palo y orinó por mí. Recuerdo que no le conté a mi mamá porque tenía miedo que me pegue, luego de dos años ya no veía más nada, solo todo borroso”, relató.
Cuestionaba a Dios
Esto le afectó bastante y, cada tanto, en sus oraciones cuestionaba a Dios por no tener todos los dedos y por haberle quitado la vista. “Le preguntaba en qué había fallado para que me quite mi vista, pero luego le agradecí porque con esto me salvó de muchos pecados, ya que capaz si veía iba a caer en tentaciones”, reflexionó.
Es médico ñana
Damasio dijo que Dios le dio un don especial, que es sanar a las personas a través de los remedios yuyos y la oración, por lo que es considerado medico ñana desde hace 37 años.
“Hace 17 años que me especialicé en columna desviada, a más de mil personas ya curé por la gracia de Dios y con esto saqué adelante a mis 4 hijos y a mi señora”, agregó.
Aconsejó a los jóvenes a no ser ate’y (holgazanes) para trabajar, que él sin tener todos los dedos puede hacer de todo, ellos con más razón podrán.
“Robar no está bien, se debe trabajar y conseguir honestamente las cosas”, añadió.