Los cinco detenidos por el asesinato del fiscal Marcelo Pecci en Colombia hablaron hoy en audiencia sobre el caso y aceptaron que mataron y formaron parte del plan del crimen contra el agente investigador paraguayo. Entre sus confesiones pidieron perdón a la familia del fallecido y a la nación paraguaya.
“Quiero pedirle a Colombia y a ustedes que me perdonen, igualmente a la familia del señor Pecci por el error que cometí, a Paraguay, a mi familia y al mundo entero, que no volveré a cometer un acto así, estoy arrepentida de todo corazón, es la primera vez que hago esto y jamás lo volvería a cometer”, dijo Marisol Londoño, una de las detenidas por servir de “campana” a los sicarios.
Wendry Stil Scott Carrillo, señalado de disparar contra el fiscal, también pidió perdón a la familia del fiscal y a Paraguay, “que me perdonen por el hecho cometido y que no volveré a cometer un error como este”.
Como si fuera un discurso, Eiverson Adrián Arrieta, el acusado de transportar a los asesinos hasta la playa donde estaba Pecci con su esposa, resaltó sus disculpas a Paraguay, a la familia del fiscal. “Les digo que no volveré a cometer un delito como este, es la primera vez que cometo un delito como este y yo sé que con una disculpa no voy a resucitarlo, pero de todo corazón me arrepiento ante el juzgado de Colombia y las autoridades de Paraguay”, alegó.
Cristian Camilo Monsalve, hijo de Marisol, también se disculpó por el papel que jugó dentro de la organización criminal que acabó con la vida del fiscal.
Los detenidos serían juzgados esta misma tarde, no obstante, hay versiones de que el juicio se aplazaría hasta mañana.