29 mar. 2024

Sacerdote condenado a más de 4 años por abuso

La víctima fue un niño sometido en varias ocasiones por el sacerdote, se comprobó en juicio. El pa’i no pidió perdón.

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Según denuncia hecha por la madre del muchacho, el religioso estaba enamorado de su hijo de 13 años.

Luego de poco más de dos horas de juicio el sacerdote Félix Miranda Gamarra fue condenado a cuatro años y medio por abuso sexual en niños.

En un juicio anterior, en el año 2018, Miranda había sido condenado a dos años, pena que fue apelada por la defensa y la Fiscalía.

Esto generó un nuevo juicio que se realizó con el único fin de volver a evaluar la condena, explicó el fiscal Luis Albertini.

“Los hechos ya estaban probados, solo teníamos que contrastar los atenuantes y agravantes”, refirió el acusador.

Albertini indicó que hay varios agravantes que no fueron considerados en el primer juicio. Entre ellos, la forma en que se dieron los hechos considerando que la víctima tenía 13 años cuando el pa’i empezó a perseguirlo y posteriormente abusar de él, en reiteradas ocasiones a cambio de regalos.

“Se valoró también si tuvo algún tipo de arrepentimiento, si pidió perdón. Pero durante el juicio él no pidió perdón ni se notó algún tipo de arrepentimiento de su parte”, expresó Albertini.

Acotó que, en nueve años de carrera, fue la primera vez que enfrentó un juicio por la condena. “Solicitamos la pena de 5 años, pero el Tribunal consideró que lo ideal era 4 años y 6 meses”, manifestó.

El Tribunal fue presidido por la Dra. Diana Arana e integrado por los jueces Carina Ruiz Díaz y Gustavo Arzamendia.

El caso

El caso data del año 2015. La madre del niño denunció al párroco de la iglesia San José Obrero de Encarnación.

La mujer había acudido al mismo para pedirle ayuda debido a que el niño era muy rebelde.

Sin embargo, luego de haber empezado a tratar con el padre, empezó a cambiar de actitud.

La mujer descubrió que el religioso le había regalado una costosa guitarra, celular y hasta le organizó su cumpleaños de 14 años.

Incluso aquel día, el adolescente fue víctima de Miranda en la propia casa parroquial, donde le tomó una foto desnudo.

Albertini mencionó que la condena todavía no está firme. Que probablemente la defensa del sacerdote presente una nueva apelación y la causa sería evaluada por la Cámara.

Lo perseguía de una alevosa forma

Según la denuncia hecha por la madre de la víctima, cuando su hijo no iba a la iglesia, el párroco iba a la casa a visitarlo. Refirió incluso que el sacerdote estaba “enamorado” de su hijo, por eso le daba regalos caros o invitaba a salir a costosos lugares.

También lo llevaba a diario al colegio en su propio vehículo. Tras ser sometido el chico a exámenes médicos se comprobó que fue víctima de abuso.