Atado de las patas traseras con alambre de púas y pidiendo socorro toda la noche-madrugada estaba Ángel, cachorro de unos seis meses que fue rescatado del frente de su casa en Ñemby. El animal estuvo atado por más de ocho horas, por lo que el amarre le dejó graves daños.
Vecinos que denunciaron las condiciones en que se encontraba el perro contaron que, cuando escucharon sus aullidos, pensaron que estaba ladrando porque se había quedado afuera. Sin embargo, al día siguiente (ayer), se percataron de que el can estaba totalmente indefenso por las ataduras, por lo que dieron el aviso a un grupo animalero.
“Le tuvieron que sedar al perro para desprender el alambre. Se le hizo una anestesia local para cortar su atadura, una de las patas está muy dañada. El alambre llegó al hueso”, contó Edith Ortiz Gullón, de la organización “Refugio Pako”.
La rescatista de animales mencionó que la pata estaba muy inflamada y que, si eso no se controla, pueden llegar a perder una de las extremidades. “Los tejidos se rompieron todo y la sangre juntaba muchas moscas”, aseguró el activista.
Los lugareños intentaron ayudar, pero al ver que no había caso, llamaron a los animaleros.
La denunciante afirmó que unos voluntarios estuvieron indagando en el barrio y que los vecinos aseguraron que la dueña, Gilda Noldin, fue la que le hizo eso a su mascota. A raíz de ello, juntaron los testigos y pruebas para que esta mañana puedan presentar una demanda en la Fiscalía de Ñemby contra la propietaria de la mascota, por maltrato y crueldad animal.
Perro atacado por dos pitbulls
La internauta Diana Valeria Patiño Bogarín denunció en el grupo Olfateando Huellas que dos pitbulls le hicieron un brutal ataque a su perrito. La mascota resultó con varias heridas de consideración, pero se salvó de milagro.
Patiño advirtió que los animales andan sueltos por el barrio San Juan, de la ciudad de Fernando de la Mora, Zona Sur. Los dueños le afirmaron que los pitbulls se encuentran con paradero desconocido, por lo que representa un peligro.