Los cuatro hijos de ña María Leguizamón (37) quedaron sin cama, luego de que unos delincuentes entraron en su vivienda y le robaron lo poquito que tenía.
Hace unas semanas, unos ladrones ya habían entrado a la humilde casa, esa vez se llevaron su frazada, pero no dijo nada, porque le pareció muy insignificantes. Sin embargo, el sábado pasado, mientras fue a hacerle compañía a su mamá, que vive a un kilómetro de su vivienda, los bandidos volvieron y esta vez se llevaron su cama.
“Me robaron el somier de mis hijos, es de una plaza y media, que saqué a cuotas. Ni siquiera terminé de pagar, recién voy por la cuota 7 de 14”, contó con la voz entrecortada. Cada mes paga G. 140.000, haciendo malabares con lo poco que gana su marido.
Lo más triste de todo es que esa cama era donde dormían sus 4 hijos. “Ahora estamos durmiendo los 6 en una sola cama. No sé cómo vamos a hacer”, dijo angustiada mostrando que solo le dejaron la cabecera. Los delincuentes también se llevaron mercaderías que ella tenía en la casa.
María vive en una casa de madera, no tienen servicios de agua ni luz ya que por más que solicitan, nadie les hace caso. Ella, acarrea agua en baldes del arroyo para sobrevivir y usa velas. “Solo quería que mis hijos duerman cómodos, por eso nos endeudamos con mi marido”, contó.
La misma apela al corazón de los bandidos para que tengan compasión y puedan devolver la cama. “Nosotros no somos una familia de dinero, nos esforzamos para tener nuestras comodidades”, expresó entre lágrimas.
Los que desean ayudar a esta familia, pueden llamar al (0984) 654-371.