En la mañana de este lunes, finalmente, se presentó ante la fiscala Esmilda Álvarez el joven Marcelo Gabriel Sosa Díaz, hermano de Araceli Sosa, ambos detenidos en calidad de cómplices del quíntuple homicidio descubierto a principios de este mes en Asunción.
El imputado aclaró que el único día que estuvo en la casa del horror fue el sábado 06 de octubre, cuando su hermana lo invitó a participar de un fiesta, pues quería que le ayude a manejar una notebook para hacer karaoke. Así lo afirmó su abogado, Néstor Candia.
Marcelo negó rotundamente haber tenido participación en el hecho y que mucho menos sabía algo sobre ello. “No tiene elementos para afirmar que tiene vínculo con el homicidio”, expresó el letrado, asegurando que la fiscala Álvarez formuló imputación contra sus defendidos en base a puras presunciones y que solicitará que la prisión preventiva de ambos sea revocada.
Tras prestar declaración, Marcelo se retiró rápidamente de la sede fiscal eludiendo a los medios para no dar declaraciones.
Por el crimen se encuentran imputados además Bruno Javier Marabel, en calidad de autor, y también como cómplice su nueva pareja, Alba Armoa. Las víctimas fueron la esposa de Bruno, Dalma María Rojas Rodas; su suegra, Elba Rodas; su suegro, Julio Rojas; y los dos hijos de Dalma.